Los pasados días 22 y 23 de junio Huesca acogió el II Congreso Nacional de Despoblación en el Medio Rural, cogiendo el testigo de Montánchez (Cáceres), que organizó el primero el año pasado, organizado por la Diputación Provincial de Huesca y la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP).

El evento, al que acudieron más de 400 personas, se dividió en seis mesas y tres talleres en paralelo en los que participaron expertos en despoblación y desarrollo rural, tanto políticos como técnicos, procedentes de toda la geografía española. La importancia de la despoblación quedó patente con la presencia de autoridades de primer nivel como el presidente de Aragón, Javier Lambán, el de la Diputación de Huesca, Miguel Gracia, el alcalde de la capital oscense, Luis Felipe, y el presidente de la Diputación Provincial de Zaragoza, Juan Antonio Sánchez Quero, también en su condición de presidente de la Comisión de Despoblación de la FEMP; además, también asistió como ponente Edelmira Barreira, Comisionada del Gobierno para el Reto Demográfico. Entre los expertos invitados a debatir el tema estuvo Luis Antonio Sáez, que realizó su exposición acerca de las relaciones entre los medios urbano y rural.

Durante estos dos días se alcanzaron interesantes conclusiones, en muchos casos coincidentes, como la necesidad de una legislación específica para el medio rural, la urgencia de que la despoblación se incluya no sólo en la agenda política española sino también en la económica, la necesidad de una fiscalidad que discrimine positivamente al medio rural, el fomento del arraigo en el medio rural, la importancia de que los fondos de la Unión Europea contemplen la despoblación, para lo que es necesario realizar medidas de lobby, o la importancia del papel de la Administración Local (ayuntamientos y diputaciones provinciales) en la lucha contra la despoblación, entre las más destacadas.